VINOS MAURY
Vinos dulces naturales del
Roselló, algo retirado en la planicie del Rousillon, el terruño de Maury se
beneficia de un microclima y de una geología (suelos arcilloso-calcáreos y
suelos de esquisto) que le confieren el privilegio de elaborar vinos de un
sabor y una potencia excepcionales. La diversidad de esta región, amplio terruño
que vale un 40% del viñedo francés, se da tanto de los ricos suelos y de los
climas, así como de las denominaciones (34 en total) y de las cepas. Gracias a
la iniciativa de jóvenes viñadores, los vinos ganaron mucho en calidad, al
ofrecer más elegancia y finura.
HISTORIA EN EL MEDIEVO
Los restos de las fincas
ocupadas por los templarios en primer lugar y los Caballeros de San Jorge a
continuación, mostraron interés en esta tierra especial para el cultivo de la
vid.
El Maury forma parte de los
grandes vinos dulces, cuyo origen se remonta al siglo XIII. En 1299, Arnaud de
Villeneuve, un médico de la corte del rey de Aragón, profesor de la Facultad de
Medicina de Montpellier y alquimista conocía la destilación de vino
desarrollado por los árabes para producir alcohol. Este "espíritu del
vino" consistía en detener la fermentación y estabilizar el vino que
contiene todavía azúcares no fermentados, dando por resultado un vino dulce
natural.
Templarios |
EDAD MODERNA
Durante la Revolución Francesa,
esta zona recibe exenciones para el cultivo de la vid. El primer catastro, que
data de 1820, indica la presencia de 1,100 hectáreas de viñedos en el pueblo de
Maury.
Maury es una tierra de vinos
dulces naturales cuya especificidad ha sido reconocida desde 1872 por la
Asamblea Nacional, lo que les da un estatus especial mediante la concesión de
impuestos indirectos (impuestos sobre el alcohol), en reconocimiento de sus
limitaciones en la producción natural.
Durante la Revolución Francesa, luchan por conservar el vino |
PERÍODO CONTEMPORÁNEO
La rebelión de los enólogos de
Languedoc en 1907.
La cosecha en 1906 fue
desastrosa en todo el Rosellón. Esto no impidió la caída de los vinos. Una familia de enólogos enfrentó dificultades
financieras ya que no podían pagar el impuesto. Informado, el gobierno ordenó a
los agentes a intervenir. El pueblo de Baixas fue el primero en rebelarse al
comienzo del año 1974.
El 18 de febrero, recibió el
apoyo de Marcelin Albert, quien envió un telegrama a Georges Clemenceau. En
cuanto a José Tarrius, enólogo y farmacéutico en Baixas, éste envió una
petición al gobierno firmada por los aldeanos, precisando que el único impuesto
que los contribuyentes podían pagar era con “su sangre”. Mientras que las
marchas de protesta se multiplicaron en las ciudades y pueblos, las prefecturas
y subprefecturas enfrentaron estos eventos vinícolas. El 19 de mayo en
Perpignan alrededor de 170,000 a 200,000 personas marcharon por la ciudad. El
evento se llevó a cabo sin incidentes mayores.
Maury accede a la AOC (Apelación
de Origen Controlado) el 6 de agosto 1936.
Languedoc Roussillon |
Los Maury de Domaine de
Pouderoux, por ejemplo, provienen de viñas situadas en pleno corazón de la
denominación de origen Maury, cuya edad promedio oscila entre 30 y 50 años.
Esta bodega posee igualmente un viñedo en la denominación de origen Latour de
Francia, una parte del cual fue plantado en 1901 y que produce vinos tintos de
una rara complejidad. Paul Pouderoux, a comienzos del siglo XX, fue pionero del
vino de Maury y defensor incansable de esta denominación de origen. Roberto, su
nieto y actual propietario de la bodega, perpetúa la tradición, con un trabajo
agrícola siempre en relación con la naturaleza y el respeto del terruño. Es la
garnacha negra la que ocupa preferentemente estos esquistos aptienses de un
bello tono grisáceo. Las viñas recorren este estrecho valle entre montículos
escarpados al pie del castillo cátaro de Quéribus.
Domaine de Pouderoux |
Los Maury son vinos viriles, con
una buena estructura tánica y que brillan con un color que evoca el granate del
Rosellón. Cuando son jóvenes seducen por sus aromas de mora y frambuesa. De
hecho, han estado durante mucho tiempo utilizados para la mejora del color de
ciertos vinos dulces. Con la edad, evolucionan hacia notas aromáticas de frutos
cocidos y de cacao bien característicos después de un período de crianza tradicional.
Es gracias entonces a la
detención de la fermentación principalmente, que los vinos Maury han alcanzado
su gusto dulce natural tan peculiar y su grandeza.
Comparable a Banyuls, El vino
Maury resulta más tánico y viril.
Estos vinos que conservan gran
parte de sus azúcares naturales pueden alcanzar de los 20 a 22 grados de
alcohol.
Un vino delicioso para acompañar
postres, principalmente a base de chocolate,
ciertos quesos de sabor pronunciado, como los quesos azules, algunas
carnes provenientes de la caza, venado por ejemplo. También suele probarse como
aperitivo.
Un vino a degustar por su
exquisito y natural sabor dulce.
PAMELA WAGNER